Roger Bacon y las semillas de un nuevo tiempo (1214-1294)

Filósofo, científico y teólogo franciscano, conocido con el nombre de Doctor Mirabilis (Doctor admirable), estudio en Oxford con otro filósofo de la época, Grosseteste. Al no encontrarse cómodo con el estilo del escolasticismo y la decadencia intelectual de sus contemporáneos se dedicó totalmente a las ciencias. De más está decir que fue muy crítico de sus contemporáneos y de muchos de los filósofos anteriores.

Sus obras filosóficas siguen generalmente a Aristóteles y a Avicena, a la vez que tiene rasgos neoplatónicos. Va a decir que nuestra mente no es la causa de la universalidad ya que, tanto la universalidad como la individualidad son rostros del mundo real siendo su causa Dios creador.

Para este autor, y adelantándose de alguna manera al planteo moderno, el método matemático no es solo un instrumento para comprender la naturaleza sino también la herramienta necesaria para establecer una ciencia universal. Según Bacon existen cuatro causas de error. La primera consiste en la sumisión a autoridades no valiosas; la segunda, al influjo de la costumbre; la tercera, a los prejuicios populares; y finalmente, la cuarta, al encubrimiento de la propia ignorancia.

Su ideal teológico era el de San Agustín, creer para comprender y comprender para creer, es decir, el de una sola ciencia universal que abarcara todos los conocimientos útiles para comprender mejor las Escrituras y para guiar la vida. Ahora bien, la filosofía, al igual que para San Buenaventura, es para Bacon un mero escalón hacia la sabiduría. La sabiduría está subordinada a la teología y no tiene valor en sí. Adquirimos la ciencia mediante la iluminación de nuestra inteligencia por parte de Dios. Dios es el que nos revela, según este autor, los principios de la filosofía aunque la experiencia tiene que completarlos.

Viendo la decadencia de su tiempo Roger Bacon propuso la reforma de la educación centrándose en cuatro cuestiones: el estudio de varios idiomas, en especial el hebreo y el griego en vistas a la lectura de las Sagradas escrituras sin depender de traducciones; ...
...la absoluta necesidad del estudio de las matemáticas; el estudio de la óptica y la psicología de la percepción; y por finalmente, el desarrollo de las ciencias experimentales. Esto último, la experimentación, sería el punto central de su propuesta de reforma.

Para Bacon existen dos modos de adquirir conocimiento. Uno es por medio del razonamiento y el otro es por medio de la experiencia. Ahora bien, existen dos clases de experiencia. Por un lado, aquella conseguida por medio de los sentidos externos, y por otro lado, aquella proporcionada por la iluminación divina. Así como la filosofía está supeditada a la teología, el conocimiento humano se encuentra subordinado a la filosofía moral. La teología es un saber universal que abarca a todas las ciencias como servidoras de ella. Es la sabiduría perfecta revelada al hombre por Dios.

Según Roger Bacon al alma se le presentan dos caminos del conocimiento. Como forma del cuerpo, el alma extrae sus conocimientos del mundo externo según se lo dan sus sentidos. Y como sustancia espiritual, el alma puede volverse hacia sí misma y contemplar las ideas innatas copia de las ideas de Dios.

Tanto la reforma educativa como la moral fueron pensadas en orden a hacer realidad la sociedad universal totalmente cristiana, o como diría San Agustín, la Ciudad de Dios.

Comentarios

  1. He podido leer el libro Roger Bacon y la Ciencia Experimental, de D. Cerqueiro, donde el autor desarrolla una biografía y doxografía de Roger Bacon,analizando sus ideas y el entorno que motivó a eruditos como él, la búsqueda del conocimiento en sus fuentes mas preciadas. También el autor describe su espiritu de invención y desarrollo del metodo científico experimental. Recomiendo este magnífico libro. Mario Simonoff

    ResponderEliminar
  2. Gracias Mario por enriquecer este post con tu aporte. Saludos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Jean-Paul Sartre, ser-en-sí y ser-para-sí

Agora (2009). Filosofía, religión y género.

El "ser para la muerte" en la filosofía de Martín Heidegger